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En primer lugar, recuerda que aún cuando seas la mujer más segura del planeta, a los chicos les gusta mucho sentir que te protegen y que ellos siguen siendo los que llevan el control de la relación. Por lo tanto, puedes empezar por hacer alguna propuesta de manera muy evasiva, y esperar a ver cuál es su iniciativa a continuación. Por ejemplo, en lugar de decirle: “Me gustaría mucho que fuéramos al cine este fin de semana”, prueba con un “¿Has visto que se estrenó la última peli de Bruce Willis? A mí me gustaría mucho verla, ¿y a ti?”.

Si no responde a semejante indirecta, puede haber dos motivos. Puede ser que la haya captado perfectamente y no le intereses (en cuyo caso probablemente te responda con algo como “Sí, ya arreglé para ir a verla mañana, después te contaré qué tal es”). En ese caso, al menos te ahorras la humillación de exponerte. No llores por él, ve a buscar a otro que sí quiera estar contigo. También puede ser, pobre inocente, que no haya entendido lo que has querido decirle (“Sí, me gustan mucho las pelis de acción, ¿irás al cine con tus amigas?”). En ese caso, menciona tímidamente que no tienes con quién ir a verla, de seguro se ofrecerá a acompañarte.

Recuerda que a los chicos los asustan los compromisos a largo plazo y hay muchos que no están dispuestos a reconocer tan fácilmente sus sentimientos. Además, para qué negarlo, primero viene la atracción, el amor viene después. Así que, si tienes pensado hacer una declaración de lo que te está pasando, evita las largas peroratas románticas que pondrán a correr a cualquier persona que no use sostén. En su lugar, menciona que te sientes atraída por él, y que te gustaría que se conocieran mejor. Por la misma razón, ni se te ocurra pronunciar las palabras “novia”, “enamorada”, “amor” o “alma gemela”, al menos durante los primeros meses de estar saliendo.

Al contrario: a los chicos, más que las palabras lindas, les llegan los gestos físicos: una mano sobre su hombro, un susurro en su oído, una mirada profunda, humedecerte ligeramente los labios mientras te mira… todas serán señales que el radar masculino estará perfectamente preparado para captar. Y por sobre todo, sonríele. De esta manera transmites seguridad en ti misma y además te verás más bella.

Si has conocido a un hombre en una disco o en un bar, tienes permiso de pedirle su e-mail, pero prueba hacerlo con una excusa. Algo así como “¿Te gusta este grupo de música? Conozco un sitio web fenomenal donde están todas las letras de sus canciones, pásame tu correo electrónico y te enviaré la dirección”. Evita solicitar su celular: es un gesto un tanto desesperado. Mejor deja que sea él quien busque llamarte.

Si.. esta en algo (H)... solo se sincera con el... parece comprensibo.. y te va a aceptar...

NO pIERDAS tiemPO si TE gusta PS habla COn el ..

pero TIENE oJERAS xD..

Dicelo n ada más.