?La historia del maquinismo sigue gestándose en el siglo XXI y a pesar de que se pensó que esta etapa podía haber sido superada sólo se ha transformado ya que las maquinas y herramientas han evolucionado, pero siguen teniendo la misma función: trabajar por el hombre.
El ejemplo más claro de esto es la pc, que en un lapso de sólo 10 años se ha convertido en una maquina más utilizada como herramienta de trabajo. Ya no es un complemento del trabajo, sino el trabajo en sí.
Las herramientas manuales pasaron a la historia y nuevas tecnologías han creado la pesadilla del hombre moderno: la supresión de la mano de obra del ser humano por la robótica.
Sin embargo, aún el hombre no ha pasado al baúl de los recuerdos junto a las herramientas antiguas. Los trabajadores ahora son mano de obra calificada, y conocer el funcionamiento de la máquina es más importante que hacer el trabajo de ella.
Los técnicos y supervisores de las fábricas cumplen un rol fundamental en la cadena productiva. La vieja caja de herramientas ya no es necesaria, pero la materia gris del operario lo es que nunca.
Las máquinas y herramientas se han unido en un todo y gracias a la operación de las primeras junto al software que las controlan, el trabajo humano es más saludable en algunos sectores como el automotor y la metalmecánica.
Siguen habiendo actividades que sólo pueden desarrollar los hombres de forma manual, pero lo interesante es que los trabajos peligrosos ya no ponen en riesgo al vida de ninguna persona.
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?La historia del maquinismo sigue gestándose en el siglo XXI y a pesar de que se pensó que esta etapa podía haber sido superada sólo se ha transformado ya que las maquinas y herramientas han evolucionado, pero siguen teniendo la misma función: trabajar por el hombre.
El ejemplo más claro de esto es la pc, que en un lapso de sólo 10 años se ha convertido en una maquina más utilizada como herramienta de trabajo. Ya no es un complemento del trabajo, sino el trabajo en sí.
Las herramientas manuales pasaron a la historia y nuevas tecnologías han creado la pesadilla del hombre moderno: la supresión de la mano de obra del ser humano por la robótica.
Sin embargo, aún el hombre no ha pasado al baúl de los recuerdos junto a las herramientas antiguas. Los trabajadores ahora son mano de obra calificada, y conocer el funcionamiento de la máquina es más importante que hacer el trabajo de ella.
Los técnicos y supervisores de las fábricas cumplen un rol fundamental en la cadena productiva. La vieja caja de herramientas ya no es necesaria, pero la materia gris del operario lo es que nunca.
Las máquinas y herramientas se han unido en un todo y gracias a la operación de las primeras junto al software que las controlan, el trabajo humano es más saludable en algunos sectores como el automotor y la metalmecánica.
Siguen habiendo actividades que sólo pueden desarrollar los hombres de forma manual, pero lo interesante es que los trabajos peligrosos ya no ponen en riesgo al vida de ninguna persona.