bueno esto lo saque de una pagina asi que no fue mi abuelo el que me la conto jeje
Una historia de la Matlazihuatl
Ness (México)
Hola, ésta historia me la contó mi abuelo hace poco. Dice que cuando era joven le encantaba tocar guitarra, y varios chavos en su pueblo se reunían para llevar serenata a sus novias o a las chavas que les gustaba. Vivía en un pueblo rústico muy lejos de la ciudad, dice que en ese entonces no había luz en todo el pueblo, sólo llegaba a las 7:00 pm y se iba a las 11:00 pm. (la luz).
Entonces, cuando terminaban de “echar gallo” como ellos le llamaban a las serenatas, se iban cada uno a sus casas. Es ahí que cuenta que cierta vez al regresar a su casa cerca de la una de la madrugada, caminaba por las callejuelas retorcidas y empotradas del pueblo alumbrado sólo por la luz de la luna y la de un pequeño candil de petróleo. Al pasar entre dos casas supuestamente abandonadas percibió, a medias, un bulto que le llamó de sobremanera la atención. El bulto se incorporó dejando ver apenas la figura de una mujer, él dirigió la luz de su candil hacia la mujer, avanzando unos pasos hacia ella, y pudo percatarse de su aspecto físico, dice; “era una mujer de cabello largo y negro, blanca, de ojos negros, preciosa, vaya era hermosa, llevaba un vestido largo blanco, parecía una túnica”, lo que le llamó la atención era que parecía que sus pies no tocaban el suelo, sólo se deslizaba.
Dice que sintió que había caído en una especie de hechizo o algo así porque el corazón le latía muy fuerte y sentía vehemencia por tocarla, acariciarla y ella no lo permitía, se deslizaba, era muy ágil y él sólo caminaba queriéndola alcanzar. No sabe a ciencia cierta cuánto tiempo pasó, pero empezó a sentir fuertes piquetes en sus piernas y en sus brazos, y eso fue lo que lo hizo volver de ese trance.
Sintiendo un frío intenso despertó para percatarse que se encontraba en la cima de un peñasco y estaba enredado en las espinas, un paso en falso y se caería al precipicio . Ya empezaba a amanecer, no sabía dónde estaba y recordando viejas consejas pudo comprender que era obra de la Matlazihuatl**.
Anduvo perdido todo el día y al entrar la tarde llegó al pueblo, estuvo a punto de morir pues fue presa de una fiebre y delirios increíble. Ahora dice haber sido muy afortunado de no haber muerto, el dolor que le produjeron las espinas lo salvó de morir
Si buscas un libro que te puede ayudar a entender mejor que hacer para recuperar tu matrimonio y asimismo conocer estrategias concretas para hacer esto entonces este es el emplazamiento adecuado https://tr.im/1A9DS , el libro Recuperar Mi Matrimonio.
Las enseñanzas que tiene esta guía, Recuperar Mi Matrimonio, están respaldadas por casos de éxito de parejas que han podido recuperar su matrimonio aplicando las técnicas que enseña la autora de este volumen, Natalia Fernández así que, este manual no es uno para ir “a la suerte” sino uno que te enseñara exactamente qué hacer para recuperar tu enlace.
La Matlacihua se remonta a las épocas más primitivas de nuestras raíces. Era la diosa de la muerte, Mictlantecihuatl (Mic—muerte, tlan—lugar, cihuatl—mujer, señora. La señora del lugar de los muertos). Es la que regía el inframundo, y tenía un esposo— Mictlantecutli (El señor del lugar de los muertos). Mientras pasaban los milenos, su nombre se deformó y quedó Matlacihua. Se cortó el nombre, se hizo en dos pedazos, y se juntaron los dos pedazos. Pero originó de la verdadera diosa de la muerte, la diosa del inframundo. Aquí el inframundo no era malo—nos trajeron la creencia del infierno los Europeos. Aquí, pedirle algo a la muerte era pedir un poco de vida. Nosotros, en este lugar, les pedíamos principalmente a la muerte porque es esa la que nos va a llevar. Le pedíamos otro poco de tiempo. Así que acá, en América Central, la muerte primordial era importantísima.
En la noche, cuando estábamos más desprotegidos, le pedíamos un favor al dios de la noche. Obviamente, no se lo podía pedir al dios del día, un dios que en esos momentos ni siquiera estaba presente. Por lo tanto, la importancia de esos dioses no quiere decir que fuéramos satánicos, como se podría pensar en esta época, sino que las cosas que ahora aceptamos por ser malvados y malignos eran en ese tiempo cosas buenas—cosas que mas nos protegían durante la vida. La noche, la muerte, la oscuridad, los poderes de la noche, y los animales. Eran ellos que regían la bondad de esos lugares tan peligrosos.
La Matlacihua, consecuentemente, era parecida a una mamá grande—una madre de todos. Junto a ella, existía La Huehuetsimeme, lo que quiere decir la abuela demonio. Sin embargo, no era un demonio, sino un ser que castigaba. Y La abuela Huehuetsimeme, en su turno, tenía otros ayudantes que eran mujeres descarnadas. Según las leyendas, eran mujeres muertas de cuerpo completo pero con la quijada de puro hueso sin carne. Salían representadas en los códices con tocados hermosos y pechos descubiertos—verdaderas bellas imágenes. Eran súbditos que obedecían los ordenes de la Matlacihua y la abuela demonio—las madres superiores.
En México, los hombres tenían la reputación de consumir bastante alcohol y muy seguido andaban borrachos. Esto hacía que las madres se enojaran y que a sus hijos les mandaran a la casa a compartir con sus familias—con sus esposas y sus hijos. La Mictlantecihuatl, siendo la mamá más grande de todas, era la que se enojaba más que ninguna. Por lo tanto, era ella la que conducía a los hombres ebrios a las espinas y a los lodos. Era una forma de castigarlos por no estar en sus casas con sus mamás y sus esposas.
Las epidemias del siglo dieciocho pueden ser estudiadas con mayor detalle. Una de las más destructivas fue la epidemia del matlazahuatl, que asoló México entre 1736 y 1738. Los relatos contemporáneos dan cuenta de 40,000 muertes únicamente en Ciudad de México. El nombre de matlazahuatl también fue usado para describir una pandemia anterior, que tuvo lugar entre 1576 y 1580. ¿Cuál fue el agente patógeno responsable? Se ha propuesto al tifus, la plaga, la viruela, y más recientemente, una fiebre hemorrágica causada por un arenovirus.
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se su pone que es una leyenda oaxaqueña en la cual una joven abusa de los muchachos borrachos los lastima checa esta pagina
bueno esto lo saque de una pagina asi que no fue mi abuelo el que me la conto jeje
Una historia de la Matlazihuatl
Ness (México)
Hola, ésta historia me la contó mi abuelo hace poco. Dice que cuando era joven le encantaba tocar guitarra, y varios chavos en su pueblo se reunían para llevar serenata a sus novias o a las chavas que les gustaba. Vivía en un pueblo rústico muy lejos de la ciudad, dice que en ese entonces no había luz en todo el pueblo, sólo llegaba a las 7:00 pm y se iba a las 11:00 pm. (la luz).
Entonces, cuando terminaban de “echar gallo” como ellos le llamaban a las serenatas, se iban cada uno a sus casas. Es ahí que cuenta que cierta vez al regresar a su casa cerca de la una de la madrugada, caminaba por las callejuelas retorcidas y empotradas del pueblo alumbrado sólo por la luz de la luna y la de un pequeño candil de petróleo. Al pasar entre dos casas supuestamente abandonadas percibió, a medias, un bulto que le llamó de sobremanera la atención. El bulto se incorporó dejando ver apenas la figura de una mujer, él dirigió la luz de su candil hacia la mujer, avanzando unos pasos hacia ella, y pudo percatarse de su aspecto físico, dice; “era una mujer de cabello largo y negro, blanca, de ojos negros, preciosa, vaya era hermosa, llevaba un vestido largo blanco, parecía una túnica”, lo que le llamó la atención era que parecía que sus pies no tocaban el suelo, sólo se deslizaba.
Dice que sintió que había caído en una especie de hechizo o algo así porque el corazón le latía muy fuerte y sentía vehemencia por tocarla, acariciarla y ella no lo permitía, se deslizaba, era muy ágil y él sólo caminaba queriéndola alcanzar. No sabe a ciencia cierta cuánto tiempo pasó, pero empezó a sentir fuertes piquetes en sus piernas y en sus brazos, y eso fue lo que lo hizo volver de ese trance.
Sintiendo un frío intenso despertó para percatarse que se encontraba en la cima de un peñasco y estaba enredado en las espinas, un paso en falso y se caería al precipicio . Ya empezaba a amanecer, no sabía dónde estaba y recordando viejas consejas pudo comprender que era obra de la Matlazihuatl**.
Anduvo perdido todo el día y al entrar la tarde llegó al pueblo, estuvo a punto de morir pues fue presa de una fiebre y delirios increíble. Ahora dice haber sido muy afortunado de no haber muerto, el dolor que le produjeron las espinas lo salvó de morir
Si buscas un libro que te puede ayudar a entender mejor que hacer para recuperar tu matrimonio y asimismo conocer estrategias concretas para hacer esto entonces este es el emplazamiento adecuado https://tr.im/1A9DS , el libro Recuperar Mi Matrimonio.
Las enseñanzas que tiene esta guía, Recuperar Mi Matrimonio, están respaldadas por casos de éxito de parejas que han podido recuperar su matrimonio aplicando las técnicas que enseña la autora de este volumen, Natalia Fernández así que, este manual no es uno para ir “a la suerte” sino uno que te enseñara exactamente qué hacer para recuperar tu enlace.
La Matlacihua se remonta a las épocas más primitivas de nuestras raíces. Era la diosa de la muerte, Mictlantecihuatl (Mic—muerte, tlan—lugar, cihuatl—mujer, señora. La señora del lugar de los muertos). Es la que regía el inframundo, y tenía un esposo— Mictlantecutli (El señor del lugar de los muertos). Mientras pasaban los milenos, su nombre se deformó y quedó Matlacihua. Se cortó el nombre, se hizo en dos pedazos, y se juntaron los dos pedazos. Pero originó de la verdadera diosa de la muerte, la diosa del inframundo. Aquí el inframundo no era malo—nos trajeron la creencia del infierno los Europeos. Aquí, pedirle algo a la muerte era pedir un poco de vida. Nosotros, en este lugar, les pedíamos principalmente a la muerte porque es esa la que nos va a llevar. Le pedíamos otro poco de tiempo. Así que acá, en América Central, la muerte primordial era importantísima.
En la noche, cuando estábamos más desprotegidos, le pedíamos un favor al dios de la noche. Obviamente, no se lo podía pedir al dios del día, un dios que en esos momentos ni siquiera estaba presente. Por lo tanto, la importancia de esos dioses no quiere decir que fuéramos satánicos, como se podría pensar en esta época, sino que las cosas que ahora aceptamos por ser malvados y malignos eran en ese tiempo cosas buenas—cosas que mas nos protegían durante la vida. La noche, la muerte, la oscuridad, los poderes de la noche, y los animales. Eran ellos que regían la bondad de esos lugares tan peligrosos.
La Matlacihua, consecuentemente, era parecida a una mamá grande—una madre de todos. Junto a ella, existía La Huehuetsimeme, lo que quiere decir la abuela demonio. Sin embargo, no era un demonio, sino un ser que castigaba. Y La abuela Huehuetsimeme, en su turno, tenía otros ayudantes que eran mujeres descarnadas. Según las leyendas, eran mujeres muertas de cuerpo completo pero con la quijada de puro hueso sin carne. Salían representadas en los códices con tocados hermosos y pechos descubiertos—verdaderas bellas imágenes. Eran súbditos que obedecían los ordenes de la Matlacihua y la abuela demonio—las madres superiores.
En México, los hombres tenían la reputación de consumir bastante alcohol y muy seguido andaban borrachos. Esto hacía que las madres se enojaran y que a sus hijos les mandaran a la casa a compartir con sus familias—con sus esposas y sus hijos. La Mictlantecihuatl, siendo la mamá más grande de todas, era la que se enojaba más que ninguna. Por lo tanto, era ella la que conducía a los hombres ebrios a las espinas y a los lodos. Era una forma de castigarlos por no estar en sus casas con sus mamás y sus esposas.
ni idea ,pero su nombre me da piel de pollo.
Las epidemias del siglo dieciocho pueden ser estudiadas con mayor detalle. Una de las más destructivas fue la epidemia del matlazahuatl, que asoló México entre 1736 y 1738. Los relatos contemporáneos dan cuenta de 40,000 muertes únicamente en Ciudad de México. El nombre de matlazahuatl también fue usado para describir una pandemia anterior, que tuvo lugar entre 1576 y 1580. ¿Cuál fue el agente patógeno responsable? Se ha propuesto al tifus, la plaga, la viruela, y más recientemente, una fiebre hemorrágica causada por un arenovirus.
si tu mama recien levantada
cuando no se a peinado