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El Halach Uinic era el máximo gobernante maya de una ciudad-Estado. Su principal símbolo de poder era un bastón ceremonial llamado "cetro de maniquí", que tenía la figura de K´awiil, el dios de la vida. Este poderoso jefe recibía también el nombre de Ahau y en el residía el poder absoluto sobre los asuntos terrenales y espirituales. Su cargo era hereditario dentro de una sola familia, y pasaba del padre al hijo mayor.

Por otra parte, el Halach Uinic era, al mismo tiempo el jefe local llamado "Batab" de la ciudad en que vivía. Como jefe supremo recibía tributo, convocaba a los guerreros y formulaba la política exterior del Estado. Sin embargo, en la toma de decisiones políticas se ayudaba de una especie de consejo de Estado constituido por varios jefes llamados "bataboob" que eran los gobernadores de las ciudades menores mayas. Estos jefes eran nombrados por el Halach Uinic y se encargaban de administrar sus localidades, hacer justicia y supervisar el cobro de los tributos.

que los gobernantes representaban la cabeza de el pueblo y que la guerra era una actividad mas de ritual y económica